30 jul 2010

Armónico de Principio

Tan sólo miro el silencio
transcurrir en su torpeza,
fundirse con el mar ausente
hecho lágrimas y margaritas.
Sol de sueños, un ocaso perpetuo,
ilusión de mil tierras
extraviadas sin lecho real...
¿Dónde apostar los despojos?

Desafíos que llaman
las nubes del segundo,
anticipando la huída,
destrozando castillos de arena dormida.

Cierro los ojos... Lluvia inclemente.

Susurra un roble sin nombre
- ¿Por qué le temes a Morfeo? -
Caricias vacías en mi alma sin duelo
airosa de un cielo... El invierno es mi verso.

Mayo se ha ido al olvido,
se escondió en mil retratos.
Las sepias confunden el gris...

En esta noche me descalzo,
desnudo mi cuerpo,
huerto de poeta sin rostro
tatuado en el sin destino
y terraza sin eclipse cercano.

Pétalos violentados en torbellino,
sus espinas dentro... En mis manos.
Tan sólo le hablo al espejo
escuchando su desatino.

Abro los ojos... Hermoso jardín,
hablan las rosas marchitas
- ¿No es bello su epitafio? -



29 jul 2010

Dulce Morfina

El tiempo camina despacio
consumiendo estrellas,
ocultando el brillo de un ayer.

Plantas de plomo sobre el bastión
embelesan nuevos días de nostalgia
... Caen las palomas del sueño,
tierra en medio del iris,
una rosa sin primavera al corazón.

Sacrificando todo y el destino,
dulce morfina en ríos de placer.

- ¿Se libera un "nuestro" en pleno invierno? -

Mira el reloj los ausentes pasos,
procesión que evade el desatino...
Todo calla en solemne entonación.

- ¿Dónde se oculta la esperanza? -
- Cantaría la canción nuevamente para tí,
huye al monte de las lluvias.
Esperaré por tu regreso... Tu, caída -

Movimientos segadores en pleno del cielo,
las raíces de ceniza al viento se han ido.


Imágen por: Darren Holmes

28 jul 2010

De la Infinita Flor

Y no faltase un firmamento
sobre lirios y azucenas
que bien dormidas cual tormento,
cantan solas hoy sus penas.
¿Quién entrase por la puerta
sin asir sus pasos con el tiempo
desbordando triste ausencia
en las sombras del lamento?


Abrirse el cielo cual estrella,
en la espera, contemplase el silencio
de mil trazos y triste la marea
sobre cuerpos en desprecio.


De la infinita flor
un pétalo de acero ayer naciese
¿Cómo rendirse a tal clamor
si todo aliento al viento pereciese?
Solemne es la caricia
que el aura consumase
laureando el fruto sin salida
que entre almas... Se apartace.



26 jul 2010

Los Jardines de Helena



Enamorando tristezas con un beso
bajo la fría caricia del olvido,
donde la lluvia ya no cae si no reza;
la noche es compañía de este vino.

Bailando los compases del ayer sin lirios
hechos desnudez profunda, sin sentido
van los pasos al abismo vagabundo,
esperando la llegada de un último segundo.

Desdibujando la vida en mil y un puntos
lloran los jardines del sueño invernal,
ocultando las espinas en medio de la copa...
Perenne en el auxilio del cristal.

Helena ya no existe en tristes versos
mientras canta al absoluto vacío,
entregando suspiros de mar y Luna
a primaveras en otoño consumido.

Deshojando la piel en libertad,
creando grietas y camino,
rompiendo del violín su arco
en ríos de tiempo no vivido.

Marchitando soles en noche solitaria,
vuela un arpa sin notas de sonrisa,
sembrando nostalgias; blanca melancolía.

Espacios de silencio, huertos ya perdidos,
los jardines de Helena...
Dulces gritos de un adiós.



25 jul 2010

Puertas Desiertas



Caminando en el silencio del desierto
van las risas del último condenado,
abriendo puertas al pasado indolente...
- Cierra tus ojos, te estamos olvidando -

Radiante va el pálido rostro de la felicidad,
contemplando el vacío de los cielos,
arrullando recuerdos que ya vuelan
bajo tierra y escombros desahuciados.

- ¿Has visto una rosa llorar en primavera? -
- Jamás, tan sólo la besé en mi tristeza -
- ¿Has sentido la caricia de la lluvia desolada? -
- Siempre viene, me embelesa entre sus tretas -
- Gira el cerrojo del mar sobre este suelo,
descubre la belleza de las penas obsoletas -

Corriendo va la Luna a su escalera,
sosteniendo estrellas tontas, ciegas,
ojos de Universo negro... Desierto
a toda letra que perece en la carrera.

- ¿Viste acaso al Sol dormir en su anhelo? -
- Reposa en mis brazos... Morfeo yace muerto -
- ¿Escuchaste mil sirenas? gritan desconsuelo -
- Se refugian en mis ojos, cantan hoy mi duelo -

Tragando carbón del tren sin tiempo,
escurriendo rios de sentidos no usados;
combatiendo las murallas del eterno sueño
dibujando albas, donde nace otro ocaso,
estrujando los no versos al viento
que enciende luces al próximo remanso.

Ventanas abiertas de marcos ya rotos
en cristales roídos por los gritos hoy sordos.

- ¿Te has sumergido en aguas sin fondo? -
- Abismos mentales, ¡Oceános hermosos! -
- ¿Tocaste el piano del ayer absorto? -
- Sinfonías en mis manos, giran el cerrojo,
cantan estaciones, escriben sin enojo -

- La puerta se ha cerrado tras tu rostro,
es hora que entregues de tu cuerpo los despojos.


*Imágen tomada de la web

24 jul 2010



Algo de música para ir ambientando.

Canción: The End
Album: At Winter's Hope

* Homenaje a mi abuela

Aperturas de Violín


Vientos que al invierno desvanecen
ahuyentando tardes; tristeza...
En cristales anochecida.
Tiempos que entre silencios juegan.
Dulce el clamor de las cuerdas -¡Día!-
Lluvia y cielos florecidos.


Piadosas entre sueños, alondras del desvelo
consintiendo del mar sus armonías,
terciopelos y un ayer - ¡Copas ya muy rotas!-
Profundo el cuerpo del molino sin desván.
Aperturas de violín cual río
en aquel capítulo solemne.
Respiros de la bruma en medio verso
y arcos de sollozo universal -¡Vacíos!-

Entrega del olvido, de cantos ya exento
llorando al mar en su otoño,
-¡Némesis en la obertura!-
Superflua rendición del frío y su aposento.




23 jul 2010

Malabaristas en París


Malabaristas en París

Son las tres, camina la rubia de mirada ausente, lleva su cigarro (curiosamente consumido hasta la mitad).
Poco tiempo y el café de la esquina cerrará sus puertas, para recibirme mañana a las cuatro de la tarde, verme sentar en la misma silla y hablar con cuanta persona también visite este lugar de parsimonias y tiempos lejanos.

Extraño es el silencio de llegar a casa y sentirme a mí mismo junto a la cama desteñida apuntando a la ventana, observando retratos del humo de su mano, lo sombrío de sus ojos, la belleza de su cuerpo, - ¿qué haces? – me pregunto aún sonriendo, escuchando los susurros del vecino conquistando prostitutas.

¡Techo malparido! No me mires mientras duermo, cierra los ojos conmigo, volemos bajo el suelo.

Nuevamente el humo, es el olor de mis anhelos, presuroso a la estación huye de mí, - ¿acaso huyo de ella? –
Laberíntica mañana que despierta tras el cristal, alejando a París en medio de sus juegos, accidentando mentes en esquinas que me son ajenas… Los malabaristas están en pleno.

- Lo de siempre, por favor –
- Lo siento, no es posible. Nuestro establecimiento a partir de hoy cerrará sus puertas indefinidamente –
- ¿Por qué? – pregunto sin importarme la respuesta, igual la rubia pasará en unas horas con su cigarro, quizá apagado. El café estará cerrado, - ¿y yo? –
En la misma esquina un sueño esperando.